La disfunción eréctil se define, según el Dr. Felipe Águila, urólogo de Clínica Vespucio, como “un problema sexual en el cual el paciente pierde la capacidad de lograr o mantener una erección adecuada para una relación sexual satisfactoria. Esto debe ser constante en el tiempo y generar una alteración en la calidad de vida del individuo”.
Causas más frecuentes
Se habla de dos grandes causas: psicológicas y orgánicas, entendiendo que, en un gran grupo de pacientes, ambas confluyen.
El Dr. Águila señala que la sintomatología típica es progresiva, “en la que el paciente observa una pérdida gradual de la calidad de su erección desde los 40 años. Lo anterior involucra aspectos psicológicos que comienzan a minar la autoestima y seguridad de la persona, potenciando el problema”.
La disfunción eréctil más frecuente es por injuria endotelial, lo que provoca que no llegue suficiente sangre al pene para generar la erección. Lo anterior se produce por daño del tejido cavernoso asociado a la edad y a la genética, pero también a variables ambientales, como la dieta y los estilos de vida.
El facultativo de Clínica Vespucio cita seis factores promotores de esta condición: obesidad, sedentarismo, tabaquismo, diabetes mellitus, hipertensión arterial y dislipidemia.
La detección de la disfunción eréctil es clínica. Se aplican cuestionarios que ayudan al diagnóstico y a graduar la severidad de la enfermedad. Los pacientes son sometidos a un estudio químico y hormonal, con el fin de identificar factores promotores o de riesgo de progresión del cuadro.
Su tratamiento dependerá de la causa:
En la primera línea de terapia se recetan medicamentos orales y, posteriormente, terapias inyectables o bombas de vacío, pudiéndose llegar a la cirugía.
Médico: Dr. Felipe Águila Barrera