El hombro es la articulación con más rangos de movilidad del cuerpo humano y es el sostén de las actividades de la extremidad superior, lo que nos permite realizar múltiples funciones del quehacer diario. Las lesiones habituales que aquejan a esta articulación se clasifican según su origen.
- Origen Traumático: fracturas y luxaciones que afectan al hombro y a sus estructuras cercanas (clavícula, escápula, húmero). Las luxaciones se tratan en 2 tiempos, en el manejo de urgencia que se realiza durante la etapa aguda de la lesión y que busca restablecer la articulación a su posición normal; y en el manejo preventivo, cuya finalidad es evitar un nuevo episodio.
- Origen Degenerativo: se relaciona con el deterioro estructural o funcional de la articulación del hombro. Aquí, la lesión más frecuente es la relativa al manguito rotador, que está formado por un conjunto de músculos que comienzan en la escápula y sus tendones, que se insertan en la cabeza del húmero. La patología que afecta a esta estructura incluye desde pellizcamientos subacromiales, inflamación por trauma repetido de algunas estructuras, hasta roturas complejas con alteración y desgaste de la articulación.